Ahora entiendo el porqué de los orientales (especialmente los chinos) al saludar a sus clientes como "amigo".
Si
nos ponemos a pensar habremos visto entre diez y veinte veces más a
nuestro proveedor de productos alimenticios o nuestro mozo preferido que
a nuestros tíos o primos, esos que sólo aparecen para navidad o algún
que otro cumpleaños multitudinario.
Hace rato que ya me reconoce cuando llego a la puerta de Casa China (Arribeños 2257)
la señorita proveedora a una cantidad logarítmica de alimentos y
bebidas los fines de semana desde mitad de mañana hasta la tardecita.
El principal producto que vende es un vaso grande con té rojo, coffee mate
y bolitas de tapioca. Me gusta particularmente este porque otros tés
que andan dando vuelta por el barrio chino tienen leche en polvo y no coffee mate
(muy distinto al sabor) y a veces las bolitas están crudas. A esto
sumale que vende los panes chinos rellenos y las salchichas a la
marinera fritas, cual tempura fast-food.
La
textura de las bolitas es una de las cosas más divertidas si todavía
llevas un niño (inmaduro, caprichoso y divertido) adentro, como yo. Para
mi es una bebida que se transformó en vicio; siempre que voy me compro
un vaso ($12), me lo tomo sentado en el asiento del súper que está al
lado (Ichiban) y me voy a comer a la barra del mercado Asia Oriental (sobre la calle Mendoza), salgo pipón-pipón como diría mi abuela y me doy otra vuelta para pedir otro té con perlas, como se llama entre amigos.
Algunos lo aman, otros lo odian. De algo estoy seguro: no te mueras sin haberlo probado.
El Guerrillero Culinario
2 comentarios:
Como sabes que es de coffe mate??
Me lo dijo ella. Y el sabor es diferente a otro que probé.
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